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Uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas es la generación y transferencia de conocimientos. Los inmigrantes altamente calificados de países emergentes contribuyen a aliviar la escasez de talento que enfrentan los países desarrollados y dotarles de un conocimiento continuo que favorezca la competitividad. México y Estados Unidos constituyen el corredor migratorio más importante a nivel mundial. Dentro de este corredor, la migración mexicana altamente calificada representa una valiosa oportunidad de empoderamiento tecnológico e innovador para ambos países. Pero ¿en qué medida la generación de conocimiento se da a expensas del desarrollo de las economías emergentes? Esta investigación explora el tipo de mecanismos que podrían impedir la consecución de este ODS en los países receptores de migrantes a expensas de su consecución en los países emisores. Para ello, se adoptan tanto el enfoque teórico de las externalidades como el de los grupos de interés para sugerir que estos migrantes calificados pueden integrar cadenas cerebrales que disminuyan las debilidades del sistema nacional de innovación del país de origen, ya que poseen la capacidad de asimilar y aplicar el conocimiento, No obstante, para evitar la exclusión de las sociedades de origen de la difusión del conocimiento, se debe adoptar un enfoque de múltiples grupos de interés que subraye la responsabilidad de cada actor en el fenómeno de la migración altamente calificada.

Los Dreamers son jóvenes que fueron llevados a los Estados Unidos por sus padres cuando eran niños o bebés sin su consentimiento de manera indocumentada. Estos niños y niñas se formaron y crecieron con valores estadounidenses, han socializado la mayor parte de su vida en este país, trabajado, construido una trayectoria de vida. Muchos de ellos se dieron cuenta de su estatus migratorio cuando intentaron ingresar a las universidades o intentaron aplicar para un empleo.

Después de participar en 12 Programas de Estudios en el Extranjero para Soñadores (Dreamers Study Abroad Program) del Centro de Estudios California-México (CMSC, por sus siglas en inglés) durante los años 2021, 2022 y enero de 2023, se detectó que los participantes provenientes del estado dorado tenían un mayor nivel de educación, capital humano y empleos más competitivos; asimismo, cabe resaltar que la mayoría de estos Dreamers calificados son mujeres.

El objetivo de esta investigación será presentar los factores que impulsan a los Dreamers para alcanzar desarrollo personal y movilidad social a través de la educación. La ponencia presentará resultados de entrevistas realizadas a participantes del Dreamers Study Abroad Program, así como observación participante en dicho programa.

La presente ponencia tiene por objetivo dar cuenta de la migración calificada y, en especial, de la contribución de los académicos estadounidenses al desarrollo de las ciencias y la formación profesional en México, desde la óptica de la teoría de Burke (2017), a fin de demostrar que su papel consiste, por un lado, en desprovincializar y universalizar los planteamientos científicos en el país y, por otro, fungir como traductores culturales y embajadores de una cultura científica que se vuelve cada vez más global e hibrida, tendiendo con ello puentes de colaboración entre ambos países.

Nuestro trabajo está estructurado de la siguiente forma: a) una breve síntesis de la teoría de Burke, en la que se exponen los principales postulados sobre la contribución de la inmigración a la educación y a la ciencia en los países de llagada. b) aportaciones históricas de la diáspora estadounidense al desarrollo nacional de México; y c) descripción del volumen y distribución geográfica de los migrantes calificados estadounidense en México, con base en un ejercicio estadístico y de entrevistas a profundidad.

Esta ponencia explica las contribuciones de la migración calificada en la diplomacia científica y la circulación de conocimiento en América del Norte, considerando tanto la movilidad planeada como el desplazamiento forzado. Debido a la historia que comparten los tres países, así como por los vínculos económicos y culturales potenciados por la cooperación bi- y trinacional, es posible observar que quienes cuentan con credenciales educativas migran en múltiples direcciones.

Los flujos de Sur a Norte han funcionado como válvula de escape para los profesionistas mexicanos, quienes en su calidad de embajadores culturales simbólicos promueven la imagen de México.

La circulación de migrantes calificados de Norte a Sur, aun cuando sean retirados, también propicia el fluir de capital financiero, manifestado en remesas o simplemente, largos periodos de turismo que pueden beneficiar las localidades de destino.

Finalmente, los flujos de Norte a Norte implican la superación de choques culturales en los individuos transmigrantes entre Estados Unidos y Canadá. Esta libertad de movimiento puede ser una meta en términos de lo que la región debe promover en términos de circulación de talento y capital humano de varias calificaciones, parecido a los acuerdos de movilidad de la Unión Europea. En la medida en que las fronteras son abiertas no sólo de Norte a Sur sino también de Sur a Norte, las desigualdades regionales podrían aminorarse a través de la migración, fortaleciendo el vínculo benéfico entre la migración y el desarrollo.