Desde que Carolina del Olmo publicó en 2013 el ensayo ¿Donde está mi tribu? una nueva forma de crianza empezó a emerger como relato escrito. Muchas autoras se han sumado a la temática iniciada por del Olmo con gran éxito de ventas, como María Llopis (Maternidades subversivas, 2015) o Esther Vivas (Mamá desobediente, 2019). Estas autoras describen en tono periodístico y ensayístico un tipo de crianza politizada, donde palabras como “lactivismo” o “acuerpar” se abren paso. Al mismo tiempo, defienden y explican modelos novedosos de organización como familias trans, tribus o crianzas colectivas. Sus escritos han sido recibidos como una provocación por la generación anterior, con nombres como los de Elvira Lindo, una autora con un personaje clave, la madre de Manolito Gafotas, hoy indefendible por el ejercicio de la violencia contra su hijo. Al mismo tiempo, estas activistas de la crianza respetuosa levantaban otros debates, como el del papel del padre. Paralelamente a este boom editorial, el Estado español ampliaba en 2019 la baja de paternidad sin que ningún colectivo de padres o varones lo pidiera, mientras que mantenía intacta la baja maternal. La crianza respetuosa también provoca en el feminismo la duda sobre la excesiva implicación de las mujeres en el cuidado de los niños. De esta discusión resurge una línea de la izquierda proveniente de los años setenta: acabar con las familias. En 2023, la editorial Traficantes de sueños traduce el libro Abolir la familia de Sophie Lewis, sobre el que la escritora y activista Nuria Alabao ha realizado múltiples tareas de difusión como charlas, cursos y publicaciones en prensa. En esta ponencia, se trazará un itinerario de escrituras, desde Del Olmo y su grito por una crianza respetuosa, hasta el impulso de Alabao por suprimir la familia.

La risa en la literatura femenina puede tener un potencial transgresor. Se puede caracterizar por la subversión del orden simbólico donde aquello no considerado risible por el discurso hegemónico es parte del repertorio de la comedia femenina. Por ello la risa puede ser dislocante, anárquica y poco convencional. Al explorar la risa, las mujeres exploran sus propios poderes y, por esa razón, se estima peligrosa.

La comedia escrita por mujeres ha sido poco estudiada debido a su alejamiento de los parámetros asignados por la comedia masculina, de ahí que resulta relevante contribuir a su estudio para identificar las características de una estética humorística femenina que se configura como contrapeso a la matriz discursiva heteronormativa de la risa. A partir del análisis del libro de cuentos de la escritora mexicana Ana García Bergua, La tormenta hindú (2015), se identifican los mecanismos de activación del humor y la ironía para visibilizar al subalterno. Los personajes principales, en su mayoría hombres, transitan por situaciones poco convencionales en las cuales se ven perseguidos, amenazados o envueltos en chismes y murmullos que alteran su percepción de la realidad, aunque ello no impide que se coloquen en un peldaño de superioridad moral frente al resto. Escudriñados desde atrás por las mujeres que los acompañan, los hombres no visualizan eso que ellas sí, provocando sonrisas malévolas en los lectores. Las mujeres ubicadas en un segundo plano saben más de lo que dicen; observan con mesura y discreción los pasos que conducen al abismo a los hombres, lo que se traduce en un triunfo de la mujer sobre sus opresiones.

El estudio de La tormenta hindú desde esta perspectiva revela que la mujer posee sabiduría, a pesar de los esfuerzos patriarcales por opacarla. El humor y la ironía se erigen en los mecanismos para liberar al subalterno.

Partiendo de la teoría de Giorgio Agamben de lo bio-político y el concepto propuesto por Umberto Eco que considera la Edad Media como una metáfora del mundo actual, se propone que bajo el velo del entretenimiento y el didactismo, la novela histórico fantástica despliega la posibilidad de una lectura transgresiva al ofrecer un paradigma crítico través de la re-creación y/o fabricación de un período pasado que refleja la complejidad de nuestra sociedad actual.

La presente ponencia estudia cómo la correlación entre lo inventado y lo histórico sirve como trasfondo para enfatizar el papel y el espacio ocupado por las protagonistas femeninas. En consecuencia, el análisis se establece en base a dos novelas: Ermessenda, condesa de Barcelona (1994) de Ángeles de Irisarri y Olvidado rey Gudú (1996) de Ana María Matute. La primera novela transcurre en un muy documentado siglo XI español, mientras que la diégesis de la segunda tiene lugar en un locus inventado similar a la temprana Edad Media, con una mezcla ecléctica de temas que van desde los mitos celtas a las sagas. Este estudio considerará la elección de este período como un elemento vital para el desarrollo de la intersección de lo personal y lo político. Asimismo, estudiará cómo el concepto propugnado por Agamben de inclusión y exclusión—el planteamiento de la propia supervivencia tanto política como biológica—se enviste de importancia a través de una lectura metafórica de un pasado que inevitablemente nos transporta a una crítica radical de la situación en que se encuentra la mujer en el mundo actual.